lunes, 25 de mayo de 2020

Capítulo 25


Carlos está desnudo después de la buena mamada que le ha hecho Joel, en la pantalla se puede ver en pause la imagen de Joel con su cara manchada del semen de Carlos. Joel está derrotado tirado en el piso llorando. Siente que su vida ha acabado.
--¡¡esto no es justo¡ ¡¡¡ahí se ve claramente que tú deseas esa mamada y que la has gozado¡ --Emilio.
Carlos ríe:
--sí pero imagina si yo difundo sólo las escenas en la que no salgo yo... o si yo ahora pongo en alto el volumen en el que tu hermano confiesa que es maricón...
Joel siente deseo de morir y Emilio tiene miedo que su hermano haga alguna locura:
--¿¿¡¡que es lo que quieres??¡¡ ¡¡¿dinero?¡
Carlos mira a Emilio con odio:
--¡¡no quiero más¡
--¡¡dame ese video o yo ahora mismo contaré lo que tú sabes¡¡
Carlos tumba al piso de un puñetazo a Emilio cuando trata de robar la cinta.
--¡¡este video es mi seguro, si alguno de los dos se mete conmigo, si le dicen a mi mujer algo que no me guste no sólo Soledad sino que todo el barrio sabrá que Joel es tan maricón o más que su hermano¡
Y Joel mira a su hermano llorando sangre:
--no... que nadie lo sepa...
Emilio acaricia a su hermano con cariño:
--no va a decir nada... nada...
Los dos hermanos se miran con tristeza y con cierto cariño. Emilio sufre porque todo es culpa de él. Carlos siente que ya su venganza ha avanzado mucho, que les puede hacer mucho más pero no. Además que desea a ese chico, que desea gozar de él aún les quiere hacer más daño:
--aún no está todo... ¡¡no¡¡ ¡¡gozar de mi cuerpo es algo que se paga muy alto¡ ¡¡aún falta una pieza para jugar¡¡ --dice para sí.
Y es que primero fue Emilio pero ahora Joel le ha hecho descubrir todo el deseo que puede llegar a sentir con un hombre sólo con mirarse. Los odia a los dos y los ve ahí en el piso y se les ríe:
--¡¡basura... ahí es dónde deben estar¡
Y la estocada final, Carlos agarra su trompa con las manos y les mea encima a los dos hermanos. Emilio lo para porque le tira una silla encima. Casi se lleva a su hermano arrastras porque Joel está como muerto. Los dos abandonan la habitación mientras Carlos sigue orinando y riendo y gritando:
--¡¡maricones... vaya pedazo de maricones ha tenido la zorra de vuestra madre¡¡
Se oye el grito de maricones. Joel llora. Los dos hermanos están mojado de pis. Emilio lo acaricia:
--¿estás bien?
Está muy preocupado por él.
Joel está muy dolido:
--¿¡¡¡cómo diablos quieres que esté bien¡?
Joel llora sangre por la humillación y Emilio se siente culpable por todo es culpa de él. Joel entra en su cuarto.
--prometeme que no vas a hacer ninguna locura...
--¡¡dejame en paz¡
Joel se encierra en el dormitorio. Emilio toca a la puerta. No lo quiere dejar solo.
--por favor tenemos que hablar...
Joel desea que el mundo se acaba. Llora.
--¡¡vete... vete¡
--¡¡no si no me prometes que no vas a hacer ninguna locura¡
La angustia y la protección de su hermano lo tranquilizan:
--si está... ya todo me da igual...
Emilio siente el dolor de su hermano y le angustia no poder ayudarlo:
--yo te quiero mucho, la vida sigue... No pasa nada...
--Por favor... vete, dejame solo... estaré bien...
--pero estoy aquí... estoy al pendiente...
Y mientras Joel llora recordando con deseo y con angustia la mamada que tantas ganas tenía de hacer. Piensa en lo que pensaría su padre al verlo humillado de esa manera por el esposo de su madre y por una chupada de trompa. Una ducha fría lo relaja. Mientras Emilio, sin cambiarse, se enfrenta a Carlos. El guapo esposo de Soledad va en jeans. Mira a Emilio con odio:
--¿¿¡es que quieres más?¡¡ ¡¡vete con el maricón de tu hermano¡ ¡¡Y seguro que tu hermana Ariadna es monja y no puta?¡
Emilio mira amenazante a Carlos:
--¡¡no te metas con mi hermana¡
Carlos lo mira desafiante:
--¡¡y si me meto qué?¡ ¡¡ahora mismo guardo el video --se mete la cinta en el bolsillo de los jeans-- en un banco de seguridad y si haces algo en mi contra todo el mundo sabrá que Joel es maricón¡
--¡¡¿que es lo que pretendes?
--¡¡hacerte pagar por acostare contigo¡¡
--¡¡te pagué y te gustó... ¡
--¡voy a destruir a tu familia librando al mundo de dos pedazos de maricones¡ 
--¡¡tú eres tan maricón como nosotros¡
Y Carlos enloquece. Da un puñetazo a Emilio:
--¡¡¡¡SI VUELVES A REPETIR ESTO TE MATO¡
Y se palpa el bolsillo trasero dónde guardó la cinta que compromete a Joel:
--¡¡si dices un disparate más ahora mismo la proyecto para todo el barrio¡¡
Y Carlos da la espalda y Emilio no se lo piensa y le estrella la lámpara contra la nuca y pierde el conocimiento. Emilio enseguida le busca en el bolsillo y encuentra el video. Luego se aleja sofocado. Toca al cuarto de su hermano. Joel sale de la ducha y no contesta. Emilio insiste.
--¡¡Joel... abre¡¡ ¡¡Creo que he matado a Carlos¡¡
Joel abre a su hermano totalmente desnudo:
--¿¡¡qué cosa?¡
Emilio está muy nervioso:
--¡¡no iba a permitir que usara el video¡
Joel siente que la vida le devuelve el cuerpo cuando ve en sus manos esa cinta que arruinaría su vida:
--¿es ese video?
--Sí...
Y Joel lo tira al piso y lo destruye. Se siente más tranquilo. Ahora es Joel el que toma la iniciativa porque Emilio no sabe qué hacer.
--¡¡¡lo maté¡¡ ¡¡lo maté¡
Joel le pone las manos en la mejilla:
--tranquilo... yo estoy contigo... lo que pasó fue por mi culpa... tú me quisiste ayudar... estamos juntos en estos...
--¡¡pero yo no lo quería matar¡ ¡¡¡agarré una lámpara y le di¡¡ ¡¡pero sentía tanta rabia...¡
Joel se siente emocionado por el hecho que su hermano haya sacado la cara por él. Se muestra cariñoso:
--no puedo creer que con todo lo que te desprecié por ser gay ahora --agacha la cabeza-- que sabes lo que soy tú me ayudes...
Emilio lo acaricia fraternalmente, le acaricia la barbilla para que lo mire a los ojos:
--tu eres mi hermano... nada más me importa...
Los dos hermanos se abrazan entre lágrimas. Por unos segundos se les olvida Carlos. Joel trata de calmar a su hermano. 
--vamos... a ver..
Los dos hermanos van con miedo. Carlos esta tirado en el piso, hay sangre en el piso. Carlos no tiene conocimiento. Joel le busca el pulso.
--¡¡está muerto¡¿¿verdad?
Y Joel trata de buscarle el pulso:
--pues es lo que parece.
Emilio se lleva las manos a la cabeza:
--¿y ahora qué hacemos?
Joel trata de buscar el pulso a Carlos.

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